Los desafíos de realizar evaluaciones de impacto de proyectos de desarrollo impulsados por la comunidad

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Los desafíos en las evaluaciones de impacto de proyectos de desarrollo comunitario

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Las evaluaciones del impacto examinan si las intervenciones de un proyecto han tenido un impacto en las personas y comunidades involucradas, en comparación con las personas que comparten características sociales y económicas similares fuera del proyecto. Pero, ¿cómo se identifican a las personas y comunidades para realizar esta comparación cuando un proyecto cubre toda una gama de actividades, como suele suceder en los casos de los proyectos de desarrollo comunitario?

El FIDA tiene una larga tradición de ejecución de proyectos de desarrollo impulsados por la comunidad (CDD en inglés). En la región de América Latina y el Caribe, este enfoque constituye una de las estrategias que más promueve el Fondo. Los enfoques impulsados por la demanda han demostrado ser un instrumento eficaz para empoderar a la población rural y garantizar la inclusión de las poblaciones remotas y marginadas en el desarrollo de sus propias comunidades. Sin embargo, a pesar que este enfoque presenta beneficios claros para los participantes del proyecto y los objetivos de desarrollo, este tipo de intervenciones plantea ciertas dificultades a la hora de diseñar una evaluación del impacto.

En el próximo ciclo de evaluación del impacto se han incluido dos proyectos de la región de América Latina y el Caribe: el Programa de Inclusión Económica para Familias y Comunidades Rurales en el Territorio del Estado Plurinacional de Bolivia con financiación del Programa de Adaptación para la Agricultura en Pequeña Escala (ACCESOS-ASAP) en Bolivia y el Proyecto de Fortalecimiento del Desarrollo Local en Áreas de la Sierra y la Selva Alta en el Perú. Para preparar las evaluaciones del impacto, los investigadores de la División de Investigación y Evaluación del Impacto (RIA) del FIDA viajaron a Bolivia y Perú para conocer mejor los proyectos a través de reuniones con el equipo en el país, el personal del proyecto y los participantes. Sobre la base de esas misiones se elaborarán planes de evaluación del impacto, en los que se especificarán la estrategia y los pasos a seguir para realizar las evaluaciones del impacto.

La población objetivo de ambos proyectos vive en zonas remotas que se caracterizan altos niveles de pobreza, un acceso limitado a los mercados y los servicios y la existencia de recursos naturales amenazados o en proceso de degradación. El proyecto ACCESOS-ASAP proporciona recursos financieros a grupos de base comunitaria, organizaciones de segundo nivel y otros grupos prioritarios, como mujeres y hombres jóvenes, para que puedan invertir en sistemas de gestión de los recursos naturales económicamente viables y pequeñas empresas agrícolas y no agrícolas. Se presta ayuda a los grupos comunitarios para elaborar proyectos y propuestas empresariales que después se evalúan para recibir una subvención. Los miembros de la comunidad aportan entre un 20 % y un 30 % de la cantidad total en efectivo o en especie. El Proyecto de Fortalecimiento del Desarrollo Local en Áreas de la Sierra y la Selva Alta del Perú se centra en los pequeños productores y los anima a formar una asociación para poder optar a una subvención. Los productores aportan el 20 % de la cantidad total y el dinero se utiliza para mejorar los activos necesarios para la producción, la asistencia técnica y los insumos. Además, las mujeres reciben capacitación financiera y consiguen tener acceso a cuentas de ahorros y seguros de vida.

Dado que los proyectos están impulsados por la demanda, los propios miembros de las comunidades seleccionan las actividades que desean llevar a cabo. Por ello, los proyectos abarcan una amplia gama de actividades, que van desde la conservación de los suelos, la cubierta vegetal, el riego o la mejora de las cocinas hasta la producción y transformación de una gran variedad de productos, como cuy, textiles, truchas, cerdos y café en el Perú y frutas de alto valor, flores, productos lácteos, artesanía y textiles en Bolivia.

Aunque las comunidades suelen beneficiarse de esa variedad de actividades, evaluar el impacto de los proyectos se vuelve más complicado, sobre todo determinar el grupo de comparación correcto. Para que en una evaluación del impacto se pueda discernir si determinados efectos directos son atribuibles a un proyecto, es necesario comparar a las personas que participaron en el proyecto con otras que se encuentren en una situación similar pero que no se beneficiaron de las actividades del proyecto. En los casos en que el proyecto entraña una gran variedad de actividades, determinar el grupo de comparación no es tarea fácil.

Para solventar esa dificultad, los investigadores necesitan entender bien cómo se ejecutó el proyecto y cuáles son los rasgos comunes y los supuestos subyacentes. Por consiguiente, las misiones de determinación del ámbito de las actividades incluyen reuniones con el equipo y la unidad de gestión del proyecto para hablar sobre el diseño y la ejecución de este, incluidos los cambios introducidos durante la fase de ejecución, definir las preguntas de investigación esenciales y revaluar la teoría del cambio. El equipo de la RIA también visita los emplazamientos del proyecto para entender mejor la realidad sobre el terreno.

Al concluir la misión de determinación del ámbito de las actividades, el equipo de la RIA que trabajaba en el proyecto del Perú decidió no evaluar todos los aspectos de la intervención. En su lugar, la evaluación del impacto se centrará en el componente de planes de negocios, que es el que se prevé que tendrá un mayor impacto. El estudio se delimitará a las zonas en las que los cinco principales productos escogidos por los beneficiarios sean más comunes, lo cual puede determinarse utilizando fuentes de datos secundarias, como los censos agrícolas.

En Bolivia, la misión de determinación del ámbito de las actividades brindó a la RIA la oportunidad de trabajar estrechamente con el equipo del proyecto y utilizar los datos recabados durante el seguimiento y la evaluación para hacerse una idea clara de la distribución geográfica y temática de las actividades del proyecto. En consecuencia, se decidió centrar la evaluación del impacto del proyecto en combinaciones específicas de actividades de entre las que llegaran a un mayor número de beneficiarios. Además, se utilizarán datos geoespaciales para definir un grupo de comparación adecuado entre las comunidades no beneficiarias cercanas que tengan características biofísicas similares a las de las comunidades beneficiarias. El objetivo es asegurarse de que los dos grupos tienen el mismo potencial de producción y recursos naturales similares, un aspecto fundamental en un proyecto de desarrollo impulsado por la comunidad que abarque una gran diversidad de actividades y productos.