Pese a alimentar a la población mundial, a menudo las personas que trabajan en la cadena alimentaria —en cualquiera de sus eslabones, desde que los alimentos salen del campo hasta que llegan a la mesa— sufren ellas mismas pobreza y hambre. También enfrentan condiciones de salud y de seguridad precarias y carecen de protección social y laboral. 

Las crisis, como los conflictos y el cambio climático, han puesto de manifiesto la fragilidad de nuestros sistemas alimentarios y han agravado la precariedad laboral que sufren los trabajadores del sector agroalimentario. Ha llegado el momento de formular nuevas estrategias eficaces en favor de entornos laborales sostenibles y equitativos. 

El objetivo de la Coalición por un Trabajo Decente en favor de Sistemas Alimentarios Equitativos es garantizar la justicia económica y social y el derecho a una alimentación adecuada y nutritiva para todas las personas que trabajan en la cadena alimentaria. Para lograr su propósito, promoverá los derechos humanos y del trabajo y reiterará la necesidad de implantar condiciones laborales dignas en el sector agroalimentario, como percibir un salario mínimo vital. 

La Coalición está organizada conjuntamente por el FIDA, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y CARE International.