Las mujeres de las zonas rurales
Invertir en las mujeres y las niñas de las zonas rurales
La finalidad del Mecanismo del FIDA para la Transformación en materia de Género (GMT por sus siglas en inglés) es proporcionar a más de 20 millones de personas de las zonas rurales de 20 países la información y las innovaciones que necesitan para adaptarse al cambio climático de aquí a 2030. El Mecanismo, que cuenta con el generoso apoyo de la Fundación Bill y Melinda Gates, es un incentivo para animar a los Gobiernos a obtener resultados transformadores en materia de género a gran escala en el sector agrícola.
La agricultura en pequeña escala es la fuente de ingresos de miles de millones de personas del medio rural, pero el cambio climático y la degradación de los recursos naturales amenazan los ecosistemas de los que dependen. A pesar de que los pequeños agricultores sufren en primera línea la crisis climática, solo reciben el 0,8 % de la financiación mundial para el clima.
Además, aunque las mujeres son responsables de hasta el 80 % de los alimentos que se producen en los países de ingreso bajo y mediano, la discriminación de género es una práctica muy arraigada que limita su acceso a los recursos que necesitan para aumentar su resiliencia ante el cambio climático.
Es necesario adoptar un enfoque integral que permita a las agricultoras beneficiarse de la financiación para el clima y que, al mismo tiempo, ayude a luchar contra las arraigadas disparidades de género.
Cuatro de cada cinco personas que se ven obligadas a abandonar sus hogares tras un desastre climático son mujeres.
Solo el 20 % de los planes nacionales de adaptación cuentan con un presupuesto específico para financiar actividades relacionadas con la igualdad de género.
Sólo el 4% de la Ayuda Oficial al Desarrollo se dedica a programas cuyo objetivo principal es la igualdad de género.
Los hogares encabezados por mujeres experimentan mayores pérdidas de ingresos debido al estrés térmico y las inundaciones que los hogares encabezados por hombres.