Siete innovaciones que transforman la vida en el medio rural

Para el FIDA, la innovación es mucho más que una palabra que está de moda: puede marcar grandes diferencias en la vida de la población rural. 

De hecho, los pequeños agricultores se basan en nuevas ideas, técnicas y tecnologías para progresar en un mundo en rápida evolución. La innovación es esencial para que las personas que forman el núcleo de nuestros sistemas alimentarios puedan adaptarse y transformar esos sistemas aportando mejoras. 

El FIDA busca incesantemente nuevas tecnologías y enfoques para diseñar, ejecutar y evaluar sus proyectos con el fin de mejorar el apoyo que presta a la población rural. Para ello son fundamentales las sólidas asociaciones forjadas con el sector privado y otras instituciones financieras internacionales. 

A continuación, se analizan siete innovaciones que hoy en día impulsan el desarrollo rural sostenible e inclusivo. 

1. Replantear la inversión privada 

Históricamente, el sector privado se ha mostrado reacio a invertir en financiación rural por considerarla demasiado arriesgada. Pero el Mecanismo Africano de Financiación para la Adaptación al Cambio Climático en las Zonas Rurales (ARCAFIM) está cambiando la situación. Este innovador mecanismo de distribución de riesgos incentiva a las instituciones privadas para que ofrezcan sus productos financieros a los pequeños agricultores y las empresas rurales de Kenya, Rwanda, República Unida de Tanzanía y Uganda. El ARCAFIM, que entró en funcionamiento en 2023, permitirá a cientos de miles de personas acceder a préstamos para la adaptación al cambio climático. 

2. Nuevas formas de piscicultura 

El Proyecto de Pesca Artesanal y Acuicultura del FIDA en Angola fue pionero en el uso de estanques nutricionales en las comunidades rurales. Estas innovadoras piscifactorías tierra adentro están repletas de especies autóctonas que complementan la alimentación local. Los estanques construidos por el proyecto proporcionaron tanto pescado para su consumo y venta que los piscicultores locales construyeron aún más valiéndose de sus propios recursos. Además de los estanques, se anima a las familias a cultivar huertos para diversificar aún más su alimentación. 

Pequeños agricultores de la provincia de Malanje (Angola) capturan pescado en uno de sus estanques. ©IFAD/António Penelas

 

3. Impulsar la inclusión digital 

La tecnología de cadenas de bloques se ha erigido en la catalizadora de una nueva revolución digital en todo el mundo, y el FIDA vela por que la población rural forme parte de ella. Nuestras billeteras digitales AgroWeb3, que están en fase de desarrollo, utilizan la tecnología de cadenas de bloques de forma segura y descentralizada para aumentar el acceso a las herramientas financieras digitales. Los pequeños agricultores podrán verificar su identidad al instante, conectarse con los mercados y gestionar sus finanzas de manera rápida y segura. Con la democratización de las finanzas digitales, AgroWeb3 colaborará en la transformación de la población rural en emprendedores financieramente independientes. 

4. Lograr nuevas cotas en materia de seguimiento 

El FIDA es una institución financiera internacional y, como tal, tiene entre sus prioridades velar por que su financiación llega a las personas a las que está destinada. El proyecto TRACE Blockchain está revolucionando la forma de realizar el seguimiento de la trayectoria de los fondos. Este libro de contabilidad completamente transparente, incorruptible y auditable utiliza la tecnología de cadenas de bloques para hacer el seguimiento de la trayectoria de los fondos y los bienes desde los donantes hasta que llegan a cada agricultor. El proyecto vela por que se contabilice cada centavo y fomenta la eficiencia operativa y el cumplimiento de la política del FIDA de lucha contra el blanqueo de dinero. 

5. Favorecer el cambio para las mujeres del medio rural 

En el caso de más de 50 proyectos del FIDA dirigidos a mujeres, el innovador Sistema de Aprendizaje Activo de Género (GALS) ha supuesto para ellas el empoderamiento económico, la posibilidad de repartir la carga de trabajo y una mayor influencia en la toma de decisiones. Este enfoque impulsado por la comunidad y elaborado y promocionado con el apoyo del FIDA estimula las conversaciones sinceras en los hogares y vela por que el desarrollo rural se produzca de forma equitativa desde el punto de vista del género. En Nigeria, por ejemplo, los grupos de mujeres que recibieron el apoyo del Programa de Desarrollo de las Cadenas de Valor utilizaron el GALS para convencer a los responsables masculinos de que las apoyaran en la propiedad de la tierra. 

La cooperativa de mujeres de una zona rural de Nigeria que dirige Lobabatu Adamu Ibrahim ha experimentado el efecto positivo del GALS. ©IFAD/Andrew Esiebo

 

6. Disminuir el impacto del ganado 

El ganado es una importante fuente de nutrición e ingresos para los pastores, pero también contribuye en gran medida a la emisión de gases de efecto invernadero que impulsan el cambio climático. La herramienta innovadora GLEAM-i, desarrollada en colaboración con el Banco Mundial y la FAO, permite al FIDA hacer frente a esa contradicción. Tras calcular la huella de carbono del ganado en una zona específica, el FIDA puede evaluar cómo aumentar la productividad al tiempo que se reducen las emisiones. En Kirguistán, la herramienta se utilizó para demostrar la manera en que un proyecto del FIDA podía aumentar la producción de leche y carne en un 4 % al tiempo que reducía las emisiones en un 17 %.  

7. Estimular los suelos de forma sostenible 

A menudo, las comunidades rurales que luchan por mejorar sus medios de vida no tienen más remedio que recurrir a fertilizantes y plaguicidas contaminantes. No obstante, gracias a un proyecto apoyado por el FIDA, los pequeños agricultores de la República Democrática Popular Lao están recurriendo a bacterias cultivadas con una finalidad específica, conocidas como microorganismos eficaces. Dichas bacterias fertilizan los suelos y permiten que las lombrices de tierra y otros animales beneficiosos se desarrollen pese a las plagas, con lo que favorecen el rendimiento y los medios de subsistencia de manera sostenible.  

 

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El objetivo de futuro del FIDA es avanzar hacia una innovación de carácter abierto que trascienda los sectores y la geografía. Esa es la razón por la cual el Fondo es miembro fundador de la red Moonshots for Development (M4D), cuyos miembros trabajan conjuntamente para presentar soluciones ambiciosas frente a los obstáculos mundiales al desarrollo, utilizan tecnologías emergentes y plantean periódicamente reto

Para el FIDA, la innovación es la clave de la eficacia, la eficiencia, la transparencia y la inclusividad. Por ello seguirá promoviendo e incubando ideas audaces que resulten útiles para la población rural y que muestren el camino hacia un futuro resiliente al clima y con seguridad alimentaria.