En el marco del Programa de Adaptación para la Agricultura en Pequeña Escala se pusieron en práctica “mapas parlantes” de forma experimental en Bolivia. Este instrumento novedoso pone en común la ciencia y los conocimientos comunitarios tradicionales con vistas a determinar los principales problemas y las prioridades de adaptación, ya que permite tener en cuenta a los Pueblos Indígenas, las mujeres y los jóvenes en la toma de decisiones.
Estos mapas se emplearon para:
- concienciar sobre el cambio climático;
- encontrar soluciones personalizadas;
- promover la inclusión de las mujeres y aumentar los ingresos brutos de los hogares encabezados por una mujer, e
- inspirar a otras comunidades para que adoptaran enfoques parecidos.