La población de la República del Camerún está conformada por distintas etnias, como los pueblos baka, bagyeli y bakola, bedzang, montañeses y mbororo, que se consideran Pueblos Indígenas. En general, han sufrido discriminación y han perdido sus tierras, lo cual ha forzado a muchos al sedentarismo y a abandonar sus medios de vida tradicionales.
Las estadísticas revelan que las regiones con los niveles más bajos de salud y educación son aquellas con mayor concentración de poblaciones Indígenas. Estas poblaciones tienen dificultades para acceder a los servicios públicos debido al aislamiento geográfico, el estilo de vida seminómada, los bajos niveles de alfabetización y la falta de documentos de identidad. Las mujeres y los niños y niñas Indígenas son particularmente vulnerables.
Las prácticas y los conocimientos tradicionales de los Pueblos Indígenas del Camerún han sido infravalorados y sus valores culturales, sustituidos por otros nuevos. En la revisión de la legislación en materia de tierras y bosques, deberían tenerse en cuenta los derechos de los Pueblos Indígenas.