En respuesta a la acuciante necesidad de soluciones innovadoras para hacer frente a los problemas de seguridad alimentaria, el FIDA, la FAO y el Banco Islámico de Desarrollo caracterizaron la situación de 10 países en los que los pequeños agricultores se enfrentan a diferentes problemas.
El estudio se centra en seis esferas fundamentales para mejorar la seguridad alimentaria:
técnicas poscosecha para reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos;
tecnologías de gestión de los recursos hídricos y de ahorro de agua frente al cambio climático;
control sostenible de plagas y gestión de cultivos;
comercio electrónico y acceso a los mercados;
tecnología financiera, y
energía verde para las actividades de agronegocios que llevan adelante los agricultores.
Mediante la selección y catalogación de soluciones agrícolas climáticamente inteligentes, el proyecto pretende mejorar tanto la productividad como la resiliencia, y garantizar la adaptabilidad de las tecnologías a diversos contextos agrícolas.
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