Notas sobre cómo Integración de sistemas portátiles de biogás en proyectos respaldados por el FIDA

El acceso a servicios modernos de energías renovables es un factor clave para erradicar la pobreza y garantizar la seguridad alimentaria.

Hoy en día, 2 500 millones de personas utilizan combustibles de biomasa tradicionales (carbón vegetal, estiércol, leña) como fuente principal de energía para cocinar y calentarse. Y más del 80 por ciento de estas personas (por encima de los 1 700 millones) viven en África Subsahariana o en Asia Sudoriental.

La sustitución de estos combustibles tradicionales por fuentes de energía renovables puede transformar significativamente las condiciones de vida, en particular las de las mujeres, en estas regiones, donde su capacidad de decisión a veces es escasa, incluso en asuntos domésticos, a pesar de que las tareas cotidianas del hogar pueden comprometer su salud.