25 años después de Beijing, las mujeres y las niñas de las zonas rurales son agentes fundamentales del cambio

A nivel mundial, las mujeres rurales e indígenas se encuentran en peor situación que los hombres rurales y las mujeres y hombres urbanos en casi todos los indicadores de los que se dispone de datos. Aunque comparten problemas comunes, como la ubicación rural y la discriminación por motivos de género, las mujeres y niñas rurales no son un grupo homogéneo. Las oportunidades y limitaciones a las que se enfrentan difieren a lo largo de sus vidas, contextos y circunstancias, y están influenciadas por la ubicación, el estatus socioeconómico y las identidades sociales asociadas a atributos como el origen y la etnia indígena, la edad, la discapacidad o la condición de migrante o refugiada.

El vigésimo quinto aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, también conocido como "Beijing+25", ofrece una excelente oportunidad para que los gobiernos, la sociedad civil, el sistema de las Naciones Unidas y todos los agentes del desarrollo hagan un balance de los progresos realizados en materia de igualdad de género y empoderamiento de las mujeres y las niñas.

Este documento destaca hechos clave, así como algunas buenas prácticas de los miembros de la red IANWGE en las áreas temáticas de educación; seguridad alimentaria y nutrición; salud; acceso y control de la tierra y otros recursos productivos; liderazgo, toma de decisiones y vida pública; protección y servicios sociales; cuidados y trabajo doméstico; violencia de género; y resiliencia en el contexto del cambio climático y la fragilidad.