Para crear cadenas de valor alimentarias que sean competitivas e inclusivas es necesario aplicar políticas macroeconómicas a nivel nacional que tengan por objeto mejorar el entorno empresarial del sector agrícola y crear oportunidades externas. Asimismo, es preciso adoptar medidas específicas para ese sector que promuevan la participación de los pequeños productores en cadenas de valor competitivas gracias a la reducción de los costos de acceso a los mercados.