El grupo juvenil Gilani Umoja cosecha sus frutos

Nuestra serie sobre África Oriental y Meridional está dedicada a los logros de cinco agroempresas dirigidas por jóvenes en los condados de Nakuru y Kilifi, en Kenya. Cada uno de ellos ha tenido un éxito notable, y cada uno nos ha enseñado algo valioso sobre el desarrollo rural que podemos trasladar a otros proyectos. Todos los grupos de esta serie cuentan con el apoyo de Vijabiz, un proyecto financiado por el FIDA que se dedica a empoderar a los jóvenes a través de la tutoría y el emprendimiento agroindustrial.

"Vivimos en una aldea muy poblada y, donde hay tantas personas, hay una gran demanda de comida".

Cuando Francis Kangara Wangari se paró a analizar su comunidad, encontró dos problemas. En primer lugar: la tasa de desempleo era elevada, en especial entre los jóvenes. En segundo lugar: en el mercado había margen para un nuevo negocio de venta de cereales (maíz, arroz y otros granos). Después de todo, casi todos los integrantes de la comunidad utilizaban esos alimentos; no solo eran productos básicos esenciales, sino que se usaban en una gran variedad de platos locales. Por eso, en 2017, fundó el Grupo Juvenil Gilani Umoja, como una forma de generar empleo entre los jóvenes de la comunidad y, al mismo tiempo, garantizar un suministro estable de productos básicos a su aldea.

El grupo comenzó simplemente comprando y vendiendo cereales sin procesar, pero pronto experimentó algunas dificultades. Al igual que muchas otras empresas emergentes de la zona, tenían problemas para conseguir la financiación y el equipo necesarios para sustentar su negocio. Tampoco podían poner sus productos a los precios que habrían deseado, por ser demasiado altos, y esto conducía a un escaso margen de beneficio. Además, al no tener presencia en línea, carecían de visibilidad y tenían dificultades para atraer a nuevos clientes.

Un día, el grupo vio un anuncio de la iniciativa Vijabiz, un programa que ofrece asesoramiento y capacitación empresarial a empresas agrícolas emergentes, así como donaciones para los grupos que cumplen una serie de requisitos. Se postularon al programa, que rápidamente los aceptó, y pronto pudieron asistir a cursos sobre comercialización digital, mantenimiento de registros y estrategias para agregar valor. Cuando concluyó el programa, también recibieron una donación por valor de USD 15 000: USD 10 000 para adquirir de equipos que añadieran valor a su negocio y USD 5 000 para reforzar sus contribuciones a la cadena de valor de los cereales.

Desde entonces, el Grupo Juvenil Gilani Umoja se ha transformado totalmente. Utilizaron una parte del dinero de la donación para comprar un molino de maíz, que les permite convertir sus cereales en harina. Gracias a la mayor diversidad de productos en venta, sus ingresos han aumentado.

El grupo también pudo contratar a trabajadores para que manejaran el molino, lo que creó nuevos empleos en su comunidad. En la actualidad, además de respaldar a los miembros del grupo, Gilani Umoja sustenta los medios de vida de otras familias locales.

Es el caso de Catherine Ndida, miembro del grupo y estudiante de estadística en la cercana Universidad de Agricultura y Tecnología Jomo Kenyatta. Los ingresos obtenidos a través del grupo le permiten ser económicamente independiente; ahora paga sus estudios, además de sus gastos de manutención. Gracias a la capacitación recibida en el marco de Vijabiz, también ha adquirido competencias empresariales que la ayudan a gestionar sus propias finanzas.

Tal vez el cambio más importante para el grupo haya sido la digitalización. Después de participar en la capacitación sobre comercialización digital impartida por el programa Vijabiz, el grupo creó una cuenta de Facebook para vender sus productos. Esto aumentó su visibilidad y les permitió atraer a más clientes. Además, en el contexto actual de la pandemia de COVID-19, la capacidad de funcionar en línea es más importante que nunca.

Enseñanzas extraídas

Las inversiones de los jóvenes en la agricultura son esenciales para alcanzar el ODS 2 (hambre cero). Los jóvenes agroempresarios suelen aportar nuevas ideas para dar respuesta a problemas de larga data y aprovechar sus aptitudes en diferentes cadenas de valor, al tiempo que crean nuevos empleos. Como demuestra Gilani Umoja, es fundamental respaldar a estos jóvenes a través de mentorías y capacitación en competencias empresariales y donaciones (como en el caso de Vijabiz) a fin de ayudarlos a perfeccionar sus aptitudes y llevar sus ideas a buen puerto.

Más información sobre la labor del FIDA en Kenya.
Escucha las opiniones del Grupo Juvenil Gilani Umoja aquí.

Fecha de publicación: 04 octubre 2021