Las realidades rurales se dan a conocer en todo el mundo mediante la narración de historias inmersivas

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Las realidades rurales se dan a conocer en todo el mundo mediante la narración de historias inmersivas

Tiempo estimado de lectura: 3 minutos
© Pierre-Julien Quiers

La narración de historias genera empatía y tiene el poder de conectar a las personas, allí donde se encuentren. Pocos medios de narración son tan poderosos como las películas. Sin embargo, con tanto donde elegir —cada minuto se cargan más de 500 horas de vídeo en YouTube— ¿cómo puede el FIDA hacer que se escuche la opinión de las poblaciones rurales?

Gracias a la realidad virtual y la tecnología de vídeo de 360 grados, el FIDA sumerge a los espectadores directamente en la vida cotidiana de los participantes de nuestros proyectos, muchos de los cuales viven en los lugares más remotos del mundo, desde la pequeña aldea de Marcação, al noreste del Brasil, hasta el pueblo de Maroalomainty, al sur de Madagascar y que siempre está azotado por el viento.

Miles de kilómetros de distancia, pero mucho en común

Aunque estas dos comunidades están a más de 10 000 kilómetros de distancia la una de la otra, tienen mucho en común. Ambas son testigos de primera mano de los devastadores efectos del cambio climático en sus cultivos y sus tierras. Ambas están tratando de encontrar nuevas formas de hacer sostenibles sus medios de vida y conservar, al mismo tiempo, su estilo de vida. Asimismo, ambas comunidades han cambiado para bien gracias a los proyectos financiados por el FIDA.

Nuestro equipo de grabación visitó Marcação y Maroalomainty para documentar cómo ha cambiado la vida de las poblaciones rurales. Trabajó siguiendo su ritmo diario y reveló que los Kiriri, en el Brasil, están reclamando sus tierras y cultivando yuca, al mismo tiempo que practican sus costumbres indígenas.

Entretanto, en Madagascar, el equipo grabó a los agricultores y pescadores que se enfrentan a los efectos del cambio climático, mientras los fuertes vientos y las elevadas temperaturas hacen casi imposible la pesca y el cultivo.

Grabar a estas dos comunidades fascinantes no estuvo exento de dificultades. El personal del FIDA y el equipo de grabación pasaron tiempo con los lugareños, les mostraron cómo funcionaba el equipo y se ganaron su confianza para poder dar una imagen honesta de sus vidas. El equipo fue bien acogido en las comunidades y pudieron estar presentes tanto en coloridas celebraciones como en emotivos funerales.

Un pase especial

La experiencia llegó a su fin con un pase especial de la película, en el que el jefe Kiriri, Lázaro Gonzaga de Souza, de 83 años de edad, y 35 miembros más de la comunidad Kiriri se vieron a sí mismos en escenarios de realidad virtual mientras llevaban sus trajes tradicionales de hace cientos de años.

João Marcos, pasante del FIDA descendiente de indígenas, describió así su reacción: “Se sienten privilegiados de que se les pueda ver en todo el mundo”.

El Brasil tiene más de 300 comunidades indígenas, pese a que muchos brasileños desconocen la gran diversidad de Pueblos Indígenas de su país. “Para los Kiriri es muy importante que su historia se muestre en el Brasil”, explica Marcos.

Narrando su propia historia

El FIDA adopta un enfoque participativo e impulsado por las comunidades en el ámbito del desarrollo; un proceso que también utilizamos cuando grabamos película a 360 grados. “A menudo las personas tienen una idea de lo que quieren grabar y luego no vuelven a mostrar el resultado”, dice Marcos.

“Sin embargo, esta vez se preguntó a los Kiriri qué querían comunicar sobre su cultura. Para ellos, la película muestra que los Pueblos Indígenas están acogiendo el mundo moderno y, al mismo tiempo, manteniendo y respetando su cultura”.

Historias poderosas que pueden impulsar el cambio

Estos vídeos no solo arrojan luz sobre la labor del FIDA, sino que también ofrecen una visión virtual de primera mano de la vida de las poblaciones rurales y de los desafíos a los que se enfrentan, a través de sus propios ojos. 

Espero que estos vídeos inmersivos, que ya han visto miles de personas y se han mostrado en distintos actos en todo el mundo, logren convencer a más personas de la necesidad de proteger las comunidades indígenas y persuadan a nuestros Estados Miembros a comprometerse a financiar a las poblaciones rurales que se encuentran en la primera línea de la lucha contra el cambio climático.

Consulte los micrositios dedicados a la comunidad Kiriri del Brasil y cómo los agricultores están combatiendo el cambio climático en Madagascar.